13/08/2016 | Sin categoría

Los solistas de la Filarmónica Checa presentan el programa "El sentimiento eslavo" en FIMPC

Todo el sentimiento eslavo será desplegado por los Solistas de la Filarmónica Checa en el Auditorio Pau Casals, el próximo martes, 16 de agosto, a las 20:30h, dentro del 36º Festival Internacional de Música Pau Casals.

La formación orquestal fue fundada en 1996, como conjunto Sexteto de la Filarmónica Checa, ampliado posteriormente por los más prestigiosos miembros de la Filarmónica. Al frente de la formación, el extraordinario violinista Jiří Vodičca. Entre otros miembros podemos citar el jefe del grupo de violonchelos, František Host, y el jefe del grupo de las violas, Jaroslav Pondělíček, quienes pertenecen a los mejores músicos de la Filarmónica Checa.

La música checa del siglo XIX tiene en Smetana y en Dvorak sus dos máximos exponentes, auténticos creadores de la escuela nacionalista checa que en el siglo XX tendrá insignes continuadores como Leos Janacek o Bohuslav Martinu. Pero no habría que olvidar de otros autores -como Joseph Suk- que, pese a no tener la relevancia de los anteriores, también pusieron su granito de arena para hacer de la música checa una de las escuelas de referencia en Europa.

Interpretarán, pues, obras de estos grandes autores checos. Del grande y más conocido compositor checo, Antonin Dvorak, oiremos diferentes piezas. Los Valses Op. 54, obra compuesta de 8 valses para ser tocados sólo para piano, el mismo compositor arregló dos, el número 1 y el número 4, para orquesta de cuerda, y serán estos arreglos que sonarán en el escenario del Auditorio Pau Casals. Las Danzas Eslavas, Op. 48 serán las piezas que cerrarán el repertorio de Dvorak y el concierto-

Entre medio de las obras de Dvorak, dos autores checos más querrán hacer oír su voz. Por un lado, Joseph Suk, alumno y yerno de Dvorak, hará acto de presencia con su obra La Meditación sobre el Coral de San Veceslau.
El tercer y último compositor checo que se escuchará en el Auditorio Pau Casals será L. Janacek del cual podremos sentir su Suite para cuerdas Op. 3, que a pesar de ser una de las primeras obras del autor, es una pequeña maravilla que nos puede motivar a escuchar otras obras de este autor aún poco conocidas.